EL CPD REINA SOFÍA DE GRANADA CELEBRA
EL X ANIVERSARIO DE SUS TALLERES COREOGRÁFICOS FEX
13 de diciembre de 2017: Celebramos el X Aniversario del FEX
¿Cómo surgió esta idea? Orígenes de los Talleres coreográficos
En 1989, tras una demanda social importante del ámbito de la danza, la Junta de Andalucía abre el primer Centro oficial de danza en Granada nuestro actual Conservatorio Profesional de danza. Ubicado en principio en el antiguo Palacio del Marqués de Mondéjar, y en la actualidad con sede propia en la calle Torre Machuca del barrio Zaidín-Vergeles.
Su “Taller Coreográfico”, nace fruto de varias “necesidades”; la de completar el trabajo del aula con prácticas escénicas, donde verdaderamente se pudieran mostrar las capacidades expresivas y artísticas del alumnado de Danza, la de parte del profesorado implicado en el curso hacia la investigación del lenguaje del cuerpo en las nuevas formas expresivas, y la de ambos, unidos en un proyecto que sirviese a modo de preparación previa hacia el mundo profesional en la finalización de sus estudios.
Después de unos Talleres surgidos de la implicación del profesorado, el Taller del Conservatorio se ve apoyado desde 2007 por el Festival Internacional de Música y Danza de Granada, gracias a la exposición de la idea por Alejandro Donaire-Hurtado y Carina Martín-Castro a su director de entonces D. Enrique Gámez Ortega, quien la recibió muy bien como forma de implicar a nuestro alumnado en el Festival a través del Fex. Siendo este hecho el incipiente, para ajustar las posibilidades, y estudiar la viabilidad del mismo, desarrolladas en el proyecto posterior.
En el año 2008, se presentó el primer programa del Taller Coreográfico del Conservatorio Profesional de Danza “Reina Sofía” de Granada con la coreografía “De tú a tú” de María Rovira. Años anteriores, se habían realizado talleres, pero con profesorado del centro, Mª Jesús Juan López, Alejandro Donaire-Hurtado, Carina Martín Castro, Rosario Marín, Alberto Huetos Izquierdo, Mª del Mar Andrés Fernández, Anna Novas, colaborando con instituciones se llegaron a hacer conciertos didácticos, participativos, noches en blanco, y a veces con la participación de orquestas de la ciudad, como lo fue la Orquesta del Conservatorio Superior de Música Victoria Eugenia de Granada, Orquesta del Conservatorio Profesional de Música Ángel Barrios, OCG y Joven Orquesta de Granada, pero realmente fue en 2008, cuando el centro gracias al Festival pudo contratar a coreógrafos de reconocido prestigio que le aportasen este sello de calidad.
La idea era muy sencilla, el Festival financiaba el coste de la producción de la coreografía, y el centro la estrenaba dentro de la programación del festival, en el llamado FEX o Festival de Extensión del antes nombrado.
¿Qué ha aportado esta experiencia?
La experiencia ha aportado, tanto al profesorado como al alumnado, la posibilidad de trabajar de cerca con estos invitados de reconocido prestigio. Sumergirnos en el ámbito de la investigación coreográfica con la apertura hacia nuevos lenguajes y posibilidades escénicas, que incidieran directamente en la formación de nuestro alumnado, como final de grado profesional y primeras experiencias pre-profesionales.
En un comienzo la idea era apoyar a la danza clásica, pues se encontraba de forma menos visible ante la sociedad granadina, pero poco a poco el profesorado trasformó el proyecto para posibilitar la igualdad de posibilidades ante el alumnado, indistintamente de la especialidad de danza dónde este cursase estudios.
Tras las coreografías creadas por coreógrafos de reconocido prestigio internacional desde su comienzos María Rovira, Paloma Gómez, Daniel Doña & Teresa Nieto, Antonio Ruz, Valeriano Paños, Ángel Rodríguez, Rubén Olmo, Miguel Ángel Berna, Jorge Crecis, Daniel Morales, Antonio Canales, Concha Jareño, Daniel Morales y José Agudo, han participado hasta la fecha en el proyecto granadino, que incide directamente en la excelencia formativa para la danza, creando piezas que ya hoy forman parte del propio repertorio de este centro.
Este proyecto supone una puerta abierta a una forma de trabajar en la educación de la danza “indispensable hoy día”, y es la de contar con personas y artistas de prestigio internacional que añadan nuevos conceptos, valores y profesionalidad al joven intérprete, haciéndole crecer en el difícil campo del control corporal, de la expresividad y la versatilidad requerida en este siglo para el intérprete.
El centro mantiene un convenio firmado con el Festival Internacional de Música y Danza, y además lo contempla en su diseño curricular, para que el proyecto pueda ser desarrollado correctamente y además forme parte de la evaluación del alumnado y del centro positivamente. Además, la creación de un repertorio propio del centro, lo caracteriza e identifica con personalidad propia frente a cualquier otro.
Nuestros centros deberían contar con frecuencia con el trabajo de profesionales de prestigio que incidan directamente en la calidad de la enseñanza, así como en la formación continua del profesorado que se trata de garantizar a través del centro de Profesorado (CEP).
El claustro ve hoy en nuestro taller, el producto estrella que este centro educativo puede ofrecer, como parte esencial de la difícil tarea de formar a jóvenes intérpretes de danza de calidad de cualquier especialidad.
